Las personas con discapacidad enfrentan diferentes barreras para conseguir empleo y mantenerlo. Es como vivir en un laberinto, en donde la salida se encuentra lejos y detrás de muchos obstáculos.
En este laberinto pueden encontrar varios caminos, comenzando por la puerta de la Educación, que es la base para un mejor futuro. Desempleo, en donde se encuentra más del 80%. Empresas, la puerta que casi todos quisieran, pero que se abre para pocos, son escasas las que implementan estrategias inclusivas. Emprendimiento, la falta de oportunidades obliga a las personas a tomar este camino y buscar ingresos con negocios propios, ventas o cualquier espacio en la informalidad. La puerta que debería abrirse para todos es la de Legislación, leyes que apoyen su inclusión laboral y que les ofrezcan un camino para denunciar si los empleadores los explotan o les despiden de forma injusta, pero esta puerta se abre a medias y no para todos.
Todo esto lleva a la salida del laberinto, en donde se encuentran las Historias de éxito, de quienes lograron salir, saltaron las barreras y hoy tienen algo que contar. Lastimosamente, no son la mayoría.
Educación: Sin centros educativos capacitados
para atenderlos las posibilidades de conseguir
empleo en la adultez disminuyen.
Desempleo: Excluir a estas personas
representa pérdidas para todo el país.
Empresas: Barreras arquitectónicas y
actitudinales dificultan el acceso a un
trabajo digno.
Emprendimiento: La falta de oportunidades
hace que la economía informal sea la vía para
la independencia económica.
Legislación: El camino para la justicia es
complicado, pero clave para proteger
los derechos.
Historias de éxito: Pese a las barreras las
personas con discapacidad sobresalen
en diferentes ámbitos.